«Si los hombres quieren darme dinero, ¿Por qué no lo voy a aceptar? Salgo en bikini o haciendo ejercicio, eso es todo lo que hago. No ofrezco contenido sexual, no salgo desnuda. Cuando los medios ven OnlyFans automáticamente te asocian con el porno, pero en OnlyFans hay muchos niveles», explicaba esta semana la tenista estadounidense Sachia Vickery después de caer eliminada del torneo clasificatorio del US Open. A sus 30 años, desde hace unas temporadas su carrera está en declive, llegó a ser la número 73 del mundo y hoy está en el puesto 557 del ranking WTA, pero igualmente puede seguir jugando, viajando a los torneos, manteniendo a su equipo. «Me viene bien ganar un buen dinero fuera del tenis. Me da mucha libertad y me ayuda a financiar mi carrera», defendía Vickery y no es una rareza.
Cada vez son más los tenistas y los deportistas en general que ganan un sobresueldo a través de OnlyFans, una red social centrada en el contenido para adultos, de fotos eróticas a vídeos explícitos pasando por fetiches varios. Algunos se han apuntado por su cuenta y a otros los ha ido a buscar la propia plataforma, que les ha firmado un contrato de patrocinio. Pero el resultado es el mismo: una nueva fuente de ingresos y cierta polémica.
Porque Onlyfans y sus casi 400 millones de usuarios pueden ofrecer mucho dinero a los deportistas, pero también puede cerrarles puertas. Y eso aterra en los despachos. En el tenis, por ejemplo, patrocinadores de lujo como Rolex, Louis Vuitton, Lacoste o Moët & Chandon raramente querrán vincularse con esa red social y por eso el año pasado la ATP tuvo que intervenir. Tenistas como el español Pedro Martínez o el francés Alexandre Müller, esponsorizados por Onlyfans, no pueden mostrar su logo en las camisetas y el circuito revisa su contenido en redes para posibles sanciones. Si se pasan, serán castigados. «Sé que sigo siendo una tenista profesional», aceptaba Vickery.
Pedro Martínez, en el actual US Open.GETTY
«Este tipo de patrocinios pueden ser conflictivos. A la hora de patrocinar, todas las marcas estudian al resto de sponsors que tiene el deportista, el equipo o el evento en cuestión. Es posible que algunas no quieran compartir espacio con OnlyFans. Y que eso lleve a reclamaciones porque evidentemente en los contratos estas cosas están previstas», analiza Carlos Cantó, CEO de la empresa de marketing SPSG Consulting, que recuerda que la controversia no es nueva. Para nada. «Hace unos años, Playboy también patrocinó a algunos deportistas, entró en el motociclismo, y hubo una conversación parecida», recuerda Cantó, aunque ahora hay un matiz. Cuando revistas como Playboy o Interviú llegaron al patrocinio deportivo, lo hicieron en busca de visibilidad, de ser conocidas por más público, ahora OnlyFans quiere contenido.
En muchos deportes
Que la ATP u otras organizaciones hayan vetado su logo no es tan importante. Lo esencial es que tenistas en el circuito como Martínez o Müller cuelguen en la plataformas videos de su día a día como harían en Instagram o TikTok. Fundada en Reino Unido en 2016, OnlyFans no quiere ser un portal de porno más, si no que busca diversificar su oferta. «En poco tiempo han empezado a trabajar en muchos deportes y con deportistas muy concretos. Se entiende que hay una planificación clara detrás», analiza Cantó. Y no le falta razón.
Junto al grupo de tenistas, donde también está el polémico Nick Kyrgios, la plataforma apoya a numerosos pilotos de motociclismo, como la española Ana Carrasco, a equipos de automovilismo o a atletas de ultradistancia como Sabrina Stanley. Además, numerosos deportistas utilizan la plataforma, como el propio Ilia Topuria, el esgrimista Yulen Pereira, la saltadora de pértiga Alysha Newman o la jugadora de baloncesto Liz Cambage. Cambage, de hecho, llegó a confesar que sus ganancias en la red social ya superaban su salario en la WNBA. «Es muy loco, pero ahora mismo gano más dinero en un mes que sumando todo mi contrato con BNFC», aseguraba la luchadora Paige VanZant, antes en la UFC, ahora estrella del bare-knuckle, el boxeo sin guantes. Según sus cálculos y, como también advirtió el tenista Alexandre Müller, «muchos más deportistas se apuntarán a OnlyFans en los próximos meses». Si están en lo cierto, los límites de deportes como el tenis estarán a prueba.


